Por: Guillermina Gómora Ordóñez
In memorian Carlos de Cárcer
El Gran “Mati”
Estimado lector, me permito la licencia de brindar este espacio a la memoria del Gran “Mati”, Carlos de Cárcer, un ser extraordinario con una enorme calidad humana, que convertía en capote y cobijaba a los que estábamos a su alrededor. Su ejemplo de fe y gozo por la vida me acompañará por siempre. Gracias Mati, tu bendición es mi talismán.
Regresando al México real, ¡por fin!, se aprobó la Ley Federal para Prevenir y Sancionar los Delitos en Materia de Hidrocarburos, que amplía el catálogo de ilícitos y castigos para quien trafique, ordeñe, adultere o comercialice de manera indebida el oro negro procesado, que se transporta a través de una red de 8 mil 400 kilómetros de poliductos, por las entrañas de nuestro subsuelo.
De acuerdo con datos del diputado del PAN, Juan Pablo Piña, «se calcula que diariamente Pemex pierde alrededor de 50 millones de pesos por la extracción ilegal de sus ductos, y tan sólo en 2014 el monto del producto robado ascendió a 19 mil millones de pesos lo que equivale al 4.4% del total de la venta de gasolina magna y de diesel en nuestro país».
Sin duda, un lucrativo e ilegal negocio que ha convertido a Petróleos Mexicanos (Pemex) en un establo que deja millonarias ganancias, superiores a los 15 mil millones de pesos, a las bandas del narcotráfico y delincuencia organizada que ordeñan gasolina, diesel, petroquímicos, crudos y derivados.
Un delito que, aunque usted no lo crea, no era considerado grave y por tanto carecía de sanciones severas, pese a que representa para Pemex pérdidas por más de 21 mil 350 millones de pesos, como fue en 2014.
Acciones delincuenciales que, como afirma Emilio Gamboa, coordinador de los senadores priistas, “representan un peligro para las familias que habitan cerca de las tomas clandestinas, un grave riesgo para los vehículos que utilizan gasolinas robadas y un severo daño a las finanzas públicas, ya que la sustracción ilegal de gasolina y diésel asciende a 40 mil millones de pesos anuales, lo que podría utilizarse en reparar el 80 por ciento de las escuelas públicas en todo México o bien 500 millones de pesos más de lo que será la inversión para 2016 del Programa para Adultos Mayores”.
Danzas de cifras que permiten clarificar aún más la grave dimensión del problema y exige una atención inmediata respaldada por el consenso de todas las fuerzas políticas en el Congreso a fin de castigar como lo establece la ley, con 15 a 25 años de prisión y multas de un millón 50 mil hasta un millón 750 mil pesos a quienes sustraigan hidrocarburos, petrolíferos o petroquímicos de ductos, equipos, vehículos o instalaciones, sin consentimiento de permisionarios, distribuidores, contratistas o asignatarios, pena que también será aplicable a quien financie la ordeña ilegal de hidrocarburos.
Omar Fayad, presidente de la Comisión de Seguridad Pública del Senado, artífice de la nueva norma, asegura que: “Con esta nueva ley no se seguirán burlando los delincuentes detenidos en flagrancia porque los instrumentos legales y la ley como está actualmente no lo consideraba un delito grave”.
Es importante destacar que tan sólo de enero a noviembre de este año, se han ubicado 5 mil tomas clandestinas en todo el país. Bombas de tiempo, que se han convertido en un problema de seguridad nacional, basta recordar lo sucedido en el río San Juan de Monterrey Nuevo León, aquella terrible explosión de San Martín Texmelucan, Puebla, que dejó 30 muertos.
Una buena noticia es que también se castigará a quien venda litros incompletos de gasolina o gas licuado. Fayad advierte que podría costarle la concesión a los permisionarios que incurran en esta práctica que afecta al consumidor.
Ojalá esta nueva normatividad erradique también las complicidades de funcionarios, delincuentes, concesionarios y compradores del combustible que han hecho de la ordeña una mina de oro.
Vericuentos
Toluca, ruta de migrantes
En su intento por cruzar México para llegar a Estados Unidos, migrantes centroamericanos han delineado una nueva ruta que incluye al Valle de Toluca y posteriormente Michoacán, a fin de evitar los filtros de las autoridades federales o de la delincuencia organizada que están “a la caza” para deportarlos, extorsionarlos o asaltarlos. La Terminal de Autobuses de Toluca es el nuevo punto de encuentro, así lo denunció el delegado de la Cámara Nacional de Autotransporte de Pasaje y Turismo en el Estado de México, Odilón López Nava. Primera llamada para las autoridades migratorias.
La autora de Caleidoscopio, agradece el favor de su atención y el tiempo dedicado a este espacio, así como sus valiosas opiniones. Les deseo unas felices fiestas decembrinas y un 2016, repleto de salud, éxito y amor. Recuerden que tenemos una cita a partir del 5 de enero próximo.
@guillegomora