La advertencia de las autoridades del GDF en el sentido de sancionar severamente a las personas que desperdicien el agua no ha tenido el efecto que se busca. La dolorosa pérdida del recurso por quienes riegan o barren su banqueta con la manguera o lavan su coche con el mismo sistema o quienes no reparan las fugas domiciliarias por flojera o desinterés, esta vez tendrá castigo económico y judicial.
Así de contundente fue la Coordinadora del Grupo Parlamentario del PAN en la ALDF, Diputada Mariana Gómez del Campo, quien desde la tribuna propuso un punto de acuerdo para aumentar la sanción a quien haga mal uso del líquido.
“Debemos pensar no sólo en la forma de motivar a la ciudadanía a conservar el agua, sino encontrar la forma de castigar a quien no lo haga”, insistió.
Uno de los mecanismos para desalentar a quienes acostumbran malgastar el agua es incrementar las penas administrativas, por lo que planteó reformas a la Ley de Cultura Cívica del DF, para cobrar multas de mil 609 a 2 mil 298.40 pesos o arresto de 25 a 36 horas.
Por lo que toca a la Ley de Aguas del DF, Gómez del Campo propuso que las multas aumenten para usuarios domésticos de 400 a 1000 días de salario mínimo, y para las industriales o comerciales de 2 mil a 4 mil días de mini sueldo; con ello, aseguró, la ciudadanía evitará el desperdicio del recurso, toda vez que se derrama, incluso en días de recorte del servicio. “La gente debe adquirir una cultura de ahorro de agua porque es un recurso no renovable, además de escaso para el DF”.
Cabe señalar que el 52% del suministro de agua a la Ciudad de México se extrae de pozos lejanos al DF, como el Sistema Cutzamala, que llega desde el Estado de México, y su traslado representa gastos importantes, por lo que es una irresponsabilidad desperdiciarla.
