Los médicos se quejan de la secretaria de Salud, Mercedes Juan, quien ha tenido una idea peregrina: crear una fiscalía para atender casos de negligencia. Y con ese solo enunciado se ha prejuzgado y condenado a todo un gremio: son negligentes y necesitan un fiscal (un perseguidor).
Las recientes manifestaciones de médicos organizados bajo el distintivo de “#yosoy17”, en alusión a los 16 médicos “linchados” en Guadalajara a raíz de denuncias masivas cuya naturaleza no ha sido correcta ni satisfactoriamente explicada, podrían generar, si no se les atiende debidamente, un clima absolutamente peligroso en estos momentos.
Si bien la naturaleza de estas protestas no guarda relación directa con actos de gobierno, sí advierten algunos médicos la negligencia de las instituciones en torno de su labor: mal equipo, bajos salarios, exceso de trabajo, pésimas condiciones laborales y por si fuera poco, desdén por sus problemas y abandono de su gremio.
“El Seguro Social ni en Jalisco ni en las oficinas centrales —me dijo un doctor con larga trayectoria—, no ha sido capaz de intervenir por nuestros compañeros. No para exonerarlos o solaparlos, ni siquiera para brindarles asesoría jurídica en procesos al parecer amañados.”
El gobierno, experto en mantener en el circo de su burocracia animales prohibidos hasta en el circo, tiene entre sus inutilidades mayores un elefante blanco llamado Conamed, cuyo objeto es supuestamente mediar en los conflictos, buscar soluciones a los mismos de manera amigable y cuando hay problemas serios, cerrar los ojos —como ahora— y dejar las cosas en manos del Ministerio Público.
Por eso ahora, ante la confusión expresada en protestas a lo largo de 53 ciudades de la República (lo cual no es poco si se le considera expresión de inconformidad política y por tanto de imposible control posterior) los médicos se quejan de la secretaria de Salud, Mercedes Juan, quien ha tenido una idea peregrina: crear una fiscalía para atender casos de negligencia. Y con ese solo enunciado se ha prejuzgado y condenado a todo un gremio: son negligentes y necesitan un fiscal (un perseguidor).
HISTORIA. Recordemos a grandes rasgos los hechos de 1965.
“El movimiento médico comenzó en noviembre de 1964, cuando los residentes e internos del hospital 20 de Noviembre del ISSSTE reclamaron el pago de aguinaldos atrasados y 206 de ellos fueron despedidos.
“En respuesta se formó la Asociación Mexicana de Médicos Residentes e Internos (AMMRI) que comenzó a organizar paros que para el día 26 de ese mes ya abarcaban a 40 hospitales del ISSSTE, Seguro Social y Ferrocarriles.
“El 10 de diciembre el presidente Gustavo Díaz Ordaz, recién entrado en funciones, prometió estudiar sus peticiones con lo que el 15 se levantó el paro. El 20 de marzo la AMMAC llamó a separarse de los sindicatos controlados por la FSTSE y el 25 propuso la creación de un sindicato de trabajadores de la salud.
“El 19 de abril estalló otro paro que se mantuvo hasta el 3 de junio… El 26 de agosto hay otra gran manifestación, pero esa noche la policía tomó los hospitales 20 de Noviembre, Rubén Leñero y Colonia, sustituyendo a los paristas con médicos militares.
“Al día siguiente las enfermeras del 20 de Noviembre fueron secuestradas por los grupos de choque de la FSTSE. Cientos de médicos, los más activos en el movimiento, fueron despedidos y sus líderes encarcelados (WordPress)”.
¿Volverán las oscuras golondrinas?