Una de las características más notables de la obra pública en el subdesarrollo rapaz es la ausencia de mecanismos reales de control de calidad. Ya no se diga de supervisión del gasto, de revisión de procedimientos, de vigilancia de la inversión programada.
Por eso los pavimentos de quiebran –además del movimiento del suelo–, y los tubos se tapan y las coladeras se atascan No sólo por una ciudadanía proclive a tirar la basura donde sea, sino por la ausencia de una autoridad para evitarlo.
Uno de los campeones en este tipo de deficiencias es el gobierno del DF cuya solución para cualquier imprevisión –dolosa o accidental-.
Es poner un letrero con la inútil petición de disculpas por las molestias del trabajo hecho, rehecho y vuelto a hacer en la vieja filosofía de gastar a manos llenas el dinero ajeno, y de paso aumentar el propio.
Poco antes de la presumida inauguración de la línea doce del Metro, se publicó esta información:
“(www.libresur.com”) Cuando los juarenses pensaban que la pesadilla de las obras de la línea 12 del Metro había quedado atrás, el gobierno del Distrito Federal inició inesperadamente y a marchas forzadas la habilitación de un carril confinados sobre el Eje 7 Sur Félix Cuevas-Extremadura, destinado al sistema “Bus-Bici”, que incluirá la circulación de trolebuses y ciclistas.
“Para ello, se trabaja otra vez en la ruptura del pavimento recién colocado, a fin de construir un pequeño camellón para separar el carril especial.
“Los trabajos se llevan a cabo prácticamente de día y de noche, supuestamente con la intención de tener lista la obra para el 30 de octubre próximo, fecha mágica de Marcelo Ebrard para la inauguración de la tan esperada –y sufrida– Línea Dorada”.
Esta impreparación hace suponer alguna ventaja económica para alguien cuyo trabajo, por tratarse de una cosa apresurada y de urgencia, no se cotiza como de ordinario. ¿Quien gasta? La ciudad. ¿Quién gana? Cualquiera, menos la capital cuyas arcas se abren al antojo de los “olvidadizos” o de los bandidos.
Hay otro ejemplo maravilloso en este sentido.
La violación de varias leyes en la construcción de los pasos elevados en el segundo piso del imaginario Anillo Periférico (ni es anillo ni rodea nada), entre ellas la ley de la gravedad, formó durante los tiempos lluviosos cortinas de agua desde la parte superior. Es como el Niágara de la burocracia impreparada.
“Por problemas desde su construcción hace seis años (Milenio) , el sistema de drenaje del segundo piso del Periférico está siendo sustituido en su totalidad con una inversión de 80 millones de pesos.
“Los problemas de diseño de la red provocan encharcamientos en los 6.5 kilómetros de esa vía, lo que afecta no solo a quienes circulan por arriba, sino también a los que transitan por la parte baja al caerles el agua estancada, por lo que el Gobierno del Distrito Federal decidió modificar el desagüe.
“Fernando Aboitiz, secretario de Obras y Servicios, informó en entrevista que el problema se presentó por el taponamiento de la tubería, que se construyó en un ángulo de 90 grados.
“Se está haciendo una obra hidráulica de 80 millones de pesos en todo el segundo piso del Periférico, pues el principal problema que teníamos era que el drenaje estaba de manera vertical, tenía una caída de 90 grados y cualquier basura tapaba completamente la tubería”, indicó Aboitiz al comparecer ante las Comisiones Unidas de Desarrollo e Infraestructura Urbana y de Fomento de la Inversión en Infraestructura para la Ciudad”.
Las palabras de Aboitiz, por sí mismas, ya podrían ser utilizadas como evidencia de hasta dónde se puede ser incompetente. Apenas ahora entiende la Revolución Democrática la diferencia entre un tubo horizontal y uno diagonal:
Pero dijo más el Newton de las obras capitalinas:
“… Se está sustituyendo (el drenaje) para que sea de 45 grados, que hace la diferencia para que toda la basura salga y no se atore (pues sí, lo atorado no se sale), esa pequeña diferencia representa un cambio radical”. Señaló que se tienen 26 puntos de obra entre San Antonio y San Jerónimo, sobre todo donde hay pendientes.
“El funcionario capitalino indicó que todos los trabajos de sustitución y corrección del drenaje concluirán en noviembre.
“Aboitiz comentó que para los nuevos segundos pisos, el sur y el norte, el sistema de drenaje se pidió que estuviera a 45 grados y que tuvieran capacidad de absorción y almacenamiento por las lluvias atípicas que se tienen en la ciudad, “y así se está construyendo desde El Toreo a San Antonio y de San Jerónimo a Viaducto Tlalpan”.
“El secretario de Obras aseguró que los automovilistas que hayan sufrido accidentes en el Periférico como consecuencia del agua que cae del segundo piso, pueden pedir la reparación del daño.
“Por supuesto que pueden pedir la indemnización, no hay ningún problema, incluso si por las obras les ocurre algún daño, se les pide a las concesionarias que cubran la afectación, pues los trabajos los hacen junto con el Sistema de Aguas de la Ciudad de México”, manifestó.
“Para cubrir la reparación del daño, los automovilistas deben levantar un acta ante el juzgado cívico y llevar la unidad con el acta en las oficinas de Servicios Urbanos para ingresar la documentación y después de 15 días acudir a cobrar el avalúo del daño”.
Pero no todo es parchar y hacer tarde las cosas.
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Cuando el PRD y el PAN intentaban frenar el inminente avance del Partido revolucionario Institucional cuya mejor posibilidad era lanzar a Enroque Peña Nieto a la candidatura presidencial con muy grandes posibilidades de triunfo, como a fin de cuentas ocurrió, se formó una alianza extraña.
La derecha y la izquierda, si eso existiera en cualquiera de ambas definiciones, unidas en bloques amorfos y sin capacidad ni programa común ni mayor oferta excepto el bloqueo del adversario. Así, a fin de cuentas, ganaron los gobiernos de varios estados. Sus resultados en todos los casos, son altamente discutibles, especialmente en Guerrero (donde el PAN se sumó de última hora); Sinaloa y Oaxaca. El caso poblano es distinto.
Pero en fin, la política del bloqueo tuvo resultados positivos en cuanto a lo electoral así haya fracasado o al menos haya enfrentado graves dificultades en la hora verdadera de la administración pública.
Hoy la receta se vuelve a aplicar pero con una diferencia sustantiva: no tiene ya la izquierda una figura intocable a la cual consultar no con la cual contrastar sus estrategias inmediatistas de solidaridad con Acción Nacional cuya magra cosecha electoral no sólo lo ha enviado al tercer puesto, sino de plano lo ha convertido en un pepenador de oportunidades en medio del estupor de la derrota.
En una escena imposible en los tiempos de Vicente Lombardo Toledano y Manuel Gómez Morín, por ejemplo, Gustavo Madero y Jesús Zambrano presentan el nuevo bloque político ideológico sin ideología ni barniz teórico. Puro oportunismo.
“Dos partidos de la izquierda mexicana, el Partido de la Revolución Democrática (PRD) y el Movimiento Ciudadano(MC), junto con el conservador Partido Acción Nacional (PAN), aunarán sus esfuerzos para crear un bloque, capaz de luchar contra las «prácticas autoritarias» ejecutadas en el pasado por el Partido Revolucionario Institucional (PRI), que volverá a presidir el país a partir de diciembre.
“La unión que reunirá a los presidentes del PAN, Gustavo Madero, y del PRD, Jesús Zambrano, junto a sus respectivos jefes de la bancada parlamentaria y diputados del Movimiento Ciudadano, acordaron el miércoles combatir los «excesos del autoritarismo» y las «prácticas corruptas» del pasado, durante los próximos seis años de la administración del PRI en México (Globedia)”.
Como se ve la convocatoria no puede ser más feble. Luchar contra el autoritarismo y las prácticas corruptas del pasado, son frases dichas al desgaire, mediante el recetario del olvido, como si en México hubiera existido un paréntesis de pureza y en los doce años del panismo no hubo ni signos autocráticos ni malas y graves prácticas de alta corrupción.
Ahí están los casos tan repetidamente presentados de Petróleos Mexicanos, de la Comisión Federal de Electricidad y hasta de la Procuraduría General de la República donde como una casa de jaboneros, quien no ha caído ha resbalado.
Por lo pronto, y en consonancia con los días de los difuntos, un ex presidente del PAN, Luis Felipe Bravo Mena, advierte muy seguro sobre la viabilidad de este bloque:
No va ir muy lejos y tendrá su prueba de fuego con las reformas económicas.
