Allá por los fines de los años 40 Daniel Cossío Villegas en su célebre ensayo “la Crisis de México” definió al sistema de este país como una “una monarquía absoluta, sexenal y hereditaria por línea transversal».
No sabemos si más de sesenta años después seguirán esas condiciones intocadas en el fondo, pero en México no se le hace a nadie todo cuanto hoy padece un señor cuyo guapo trabajo es hacer feliz a la infanta Cristina y de cuando en cuando recibir subvenciones para supuestas obras de desarrollo social y humano, de cuyos portafolios han sido retirados cinco o seis millones de Euros para hacer más apacible el trabajo del antiguo deportista cuya conducta mete un ruido terrible en la convulsa España del atorón económico.
Pero si hasta en España se puede llevar a juicio a un habitante de la Casa Real por un quebranto financiero contra las arcas públicas, nadie pensaría semejante cosa en México. Con los fondos sisados por Urdangarín y su socio, el señor Torres a quien le van a caer a palos pues el waterpolista quien sabe si conozca la sombra, no se podrían construir ni siquiera los primeros cinco metros de la “Estela de luz”; por ejemplo.
Por un negocio chueco de cien millones de pesos -más o menos- la historia de los Borbones se contamina (como si no hubiera sido desde siempre una marranada como suele ocurrir con las monarquías) y el yerno debe caminar sólo por el desierto del juicio y el desprestigio. LO declaren a fin de cuentas culpable o no. Eso vendrá después.
A su paso rumbo a la corte en Palma de Mallorca le han tirado huevos y lo han insultado quizá como se merece y le han dicho insultos felices propios del ingenio de los indignados: ¡Urdangarín, trabaja en Burger King! O bien «Que viene Urdangarin, cuidado con la cartera» y «No hay dos sin tres, República otra vez».
Su suegro, a quien en alusión con los cartones del naipe español le llaman el “Rey de oros” pues es conocida su habilidad para intervenir en los negocios del Estado con provechos personales (a diferencia de otros monarcas cuya afición por la bebida los igualaba con el “Rey de copas”), lo ha dejado sólo como la una.
Sin embargo para quien alguna vez lo llegara a necesitar es digno destacar cómo los asesores de imagen y medios han preparado al Duque de Palma para pasar este amargo trago.
El diario “El país” describe así su comportamiento:
“Fue correcto, súper educado, repitiendo que está a disposición de su señoría muchas veces”, dijeron a coro el abogado Jordi Bertomeu, defensor de Juan Pablo Molinero, y los letrados de José Luis Ballester, Pepote; Ángel Aragón y Juan Piña. El veterano exfiscal y penalista José Zaforteza, que representa a Antonio Ballabriga, destacó el papel “excelente” del Duque de Palma en sus declaraciones y en su trato”.
El “yerno negro” inició su época defensiva mediante la fuga ante los medios. Ahora ha cambiado. Se ha escogido hasta la indumentaria especial y se ha puesto frente a las cámaras y los reporteros para responder con firmeza pero sin compromiso y sembrar la imagen de un hombre en el pleno ejercicio de su defensa.
Pero algo más podría venir en camino: la inocencia total de la “infanta” parece estar ahora también en entredicho. Si bien el rey le habría sugerido a su yerno abandonar esas prácticas de negocio a través de la fundación Noós, surgen otras ramificaciones en el extranjero de las cuales la hija del rey podría formar parte.
“Ya en la calle, el letrado de Jaume Matas mostró su preocupación por las preguntas sobre la participación de los hijos menores de la Infanta y el Duque en una de sus sociedades”.
EDUCACION
Por muchas razones importantes las negociaciones de este fin de mes para discutir el aumento salarial de los 90 mil profesores afiliados al Sindicato de Maestros al Servicio del Estado de México, una longeva institución con más de sesenta años de presencia pública y cuyo piso de negociación es del quince por ciento de alza en las percepciones. Sobre eso se comenzó a discutir.
El gobernador Eruviel Ávila halló en este grupo un apoyo notable cuando buscaba el cargo, pero eso no significa incondicionalidad ni mucho menos.
CARCELES
Quien quiera entender las cosas debería leer o releer el libro “Cárceles” del periodista Julio Scherer. Al menos estos párrafos:
“El mercado (afuera del penal, de cualquiera) prolonga la cárcel. Intereses amarrados por la corrupción acoplan a los reclusos con los comerciantes., a los guardianes con sus cómplices. Los custodios conocen la vida de los internos, de los caprichos a la desesperación. Perciben sus hambres y necesidades y las alivian a cambio de dádivas o un sueldo. A través de vías probadas por un largo tiempo, transmiten la información de la prisión a la calle y los comerciantes se encargan de satisfacer a la clientela cautiva. Franco el acceso al penal, la droga circula, circula el alcohol, circula la prostitución. La trabazón opera sin altercados, partícipe la autoridad. Fluye el dinero, fluyen los privilegios.”
La podredumbre de las cárceles no nace adentro; se importa. Viene de fuera, como los presos mismos.