Algo de lo peor en la administración pública es la permanente actitud de la alta burocracia de ofrecer a los ciudadanos apariencias de cumplimento de obligaciones elementales mediante el anuncio estrepitoso de “programas”.
Cuando la ocasión lo amerita y hasta cuando no, los funcionarios (de escaso funcionamiento por lo general) presentan con platillos y tambores un “programa “para renovar compromisos de manera innecesaria y casi siempre publicitaria, ya sea para la recolección de basura o la vigilancia de las calles. Es decir, para convertir el cumplimiento de obligaciones elementales en acto heroico y plausible.
Pero a ellos les importa más la creencia popular y menos el cumplimiento real.
Un ejemplo de eso lo tenemos en el estrepitoso fracaso del delegado Eduardo Santillán en Álvaro Obregón (hoy con la cínica cola entre las piernas) quien ha gastado miles y miles de pesos en anunciar programas de control de alcohol y giros “de alto impacto” con los resultados de todo conocidos y la exculpante cobardía con la cual oculta sus responsabilidades, o mejor dicho, sus irresponsabilidades.
“A partir de este fin de semana –se dijo el pasado jueves 12 de noviembre–, entra en funcionamiento en la Delegación Álvaro Obregón el Programa Permanente “Cero, Cero; a las Cero horas, Cero venta de alcohol”, el cual prohíbe la venta de embriagantes después de la media noche, los siete días de la semana”.
Después el huidizo delegado divulgó:
“El Jefe Delegacional Eduardo Santillán Pérez, acompañado por el Consejero Secretario del Consejo Ciudadano de Seguridad Publica y de Justicia, Luis Wertman Zaslav (un simple comparsa) , así como de funcionarios de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal, realizará… la presentación oficial del programa en el Centro Cultural San Ángel.
“Horas antes del arranque, el Jefe Delegacional advierte que tendrá “mano dura”, por lo que se reforzarán las medidas de supervisión y verificación en los establecimientos mercantiles para no permitir que se continúe con la venta indiscriminada de alcohol”. ¿Mano dura?
Aun cuando el tiroteo contra Salvador Cabañas no fue ocasionado por la venta de alcohol en una “ventanita” de barrio ni algo semejante, pero el hecho nos lleva a otra de las farsas de la delegación: el programa sobre la seguridad nocturna en bares y establecimientos similares.
La delegación A.O. se ufanó recientemente:
“Los Jefes Delegacionales de Álvaro Obregón y Coyoacán, Eduardo Santillán Pérez y Raúl Flores García, respectivamente, encabezarán este viernes 4 de diciembre, el primer operativo conjunto entre ambas demarcaciones denominado “Vida Nocturna Segura”.
“Con esta acción, los delegados verificarán que los establecimientos mercantiles de “alto impacto” como son bares, antros, cantinas, centros nocturnos, respeten los lineamientos establecidos en la Ley para el Funcionamiento de Establecimientos Mercantiles y la Ley de Protección a los No Fumadores”.
Una vez más el GDF entre el ridículo y la ineptitud.